Ortodoncia con brackets
La ortodoncia con brackets es uno de los tipos de ortodoncia que se utiliza para alinear los dientes torcidos o apiñados y para tratar la maloclusión, es decir, para solucionar problemas de mordida, cuando las mandíbulas no encajan correctamente. En definitiva, conseguir una sonrisa alineada y con un funcionamiento perfecto
Este tratamiento consiste en adherir los brackets (pequeñas piezas cuadrangulares generalmente metálicas) de forma temporal para conseguir una correcta posición de los dientes. Se crea una estructura rígida colocando cada bracket en cada pieza dental uniéndose con un arco de ortodoncia. Esta estructura permitirá corregir la mordida de forma eficaz. Asimismo, este método es muy eficaz y resistente.
En Clínica Pfaff ponemos a tu disposición el más avanzado tratamiento de ortodoncia con brackets de metal en Barcelona.
Problemas que soluciona esta ortodoncia
Se utilizan para la corrección de problemas de mordedura, alineamiento, espacio entre dientes, dientes salidos…
– Sobremordida
– Mordida invertida, abierta o cruzada
– Desviación de la línea media
– Diastemas
– Apiñamiento
Al corregir el problema utilizando la ortodoncia de brackets, estamos evitando otros problemas como la masticación y habla afectadas, enfermedades de las encías, la pérdida de dientes, el desgaste inusual del esmalte o problemas de mandíbula.
¿Qué tipos de brackets existen?
Brackets metálicos
Brackets de porcelana
Esto aporta un valor estético superior a los brackets convencionales, ya que con la cerámica podemos conseguir una tonalidad similar al color del diente además de tener algo de translucidez.
Brackets de Zafiro
Brackets de autoligado
Esto proporciona una notable disminución en la fricción entre el arco dental y los brackets. Por lo tanto, son mucho más fáciles de limpiar y no retienen placa bacteriana.
El mejor tratamiento de ortodoncia con brackets
En Clínica Pfaff queremos lo mejor para nuestros pacientes. Por ello, únicamente utilizamos el sistema de brackets autoligables. Actualmente, se trata de uno de los más valorados en el mercado. Gracias a su rápido proceso de corrección y es menos molesto en comparación con los convencionales, además de ser algo más pequeños.
También existe brackets de autoligado estéticos o de cerámica transparente, y por lo tanto, se integran mejor con el diente. Además, este tipo de material no se ve alterado por el tabaco u otros productos como el café, el vino, los cuales normalmente suelen teñir.
Existen diferentes marcas en el mercado de brackets autoligables. La más conocida es Damon. Pero también existen otras cómo las de Ormco, Smart-Clip de 3M o In-Ovation de GAC.
Ventajas de los brackets autoligables
– Menos molestias porque la fricción dentaria es menor
– Comodidad, ya que no necesitan ajustes periódicos
– Estéticos, son más pequeños y también opción de cerámicos.
– Higiénicos, al no tener gomas o ligaduras hace que no se queden restos de alimentos entre los brackets.
– Rápidos, este sistema reduce ligeramente el tiempo de tratamiento.
En Clínica Pfaff queremos lo mejor para nuestros pacientes. Por ello, únicamente utilizamos el sistema de brackets autoligables. Actualmente, se trata de uno de los más valorados en el mercado gracias a su rápido proceso de corrección. Son menos molestos en comparación con los convencionales, además de ser algo más pequeños.
También existen brackets de autoligado estéticos o de cerámica transparente, y por lo tanto, se integran mejor con el diente. Además, este tipo de material no se ve alterado por el tabaco u otros productos como el café, el vino, los cuales normalmente suelen teñir.
Existen diferentes marcas en el mercado de brackets autoligables. La más conocida es Damon. Pero también existen otras cómo las de Ormco, Smart-Clip de 3M o In-Ovation de GAC.
Ventajas de los brackets autoligables
– Menos molestias porque la fricción dentaria es menor
– Comodidad, ya que no necesitan ajustes periódicos
– Estéticos, son más pequeños y también opción de cerámicos.
– Higiénicos, al no tener gomas o ligaduras hace que no se queden restos de alimentos entre los brackets.
– Rápidos, este sistema reduce ligeramente el tiempo de tratamiento.
Preguntas frecuentes sobre brackets
¿Cómo saber si tengo que usar brackets?
Existen técnicas para verificar si es necesario el uso de brackets, tales como, las radiografías o modelos de yeso o el escaneado digital de los dientes. Aunque hay varios síntomas para detectar si es necesario el uso de brackets. Entre estos encontramos los dientes amontonados, o al contrario, los dientes separados. En segundo lugar, la mordida mal encajada, lo cual hace que los dientes sufran un mayor desgaste, entre otras consecuencias. Por último, el dolor de mandíbula constante también es un síntoma, ya que puede derivar de tener una mandíbula desalineada.
¿A qué edad debería empezar a usar brackets?
La SEDO recomienda una primera visita al ortodoncista a los 5-6 años, aunque aún no se tengan los dientes definitivos.
Lo ideal es comenzar con tratamientos de ortodoncia entre los 9 años y los 13 años que es cuando ha están todos los dientes permanentes.
En cuanto a la edad máxima, no existe ningún límite de edad para el uso de brackets.
¿Cuánto tiempo se debe usar los brackets?
Por norma general este tipo de tratamiento suele durar alrededor de 18 meses, pero se tiene que tener en cuenta el problema a tratar de cada paciente, ya que existen casos más agravado que otros, y por lo tanto, no hay una duración media igual para todos los tratamientos de ortodoncia.
¿Cuál es el precio de los brackets?
Para poder calcular el precio de este tipo de tratamiento es necesario realizar previamente un diagnóstico personalizado, ya que dependerá en su mayoría de la gravedad del problema de alineamiento dental de cada paciente.
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